Millennials run the world… (moda incluida)

La industria ha cambiado. Y no solo los que veneramos la moda lo hemos visto. Cada vez más gente te comenta “oye, es la Fashion Week de París, ¿verdad?” y tú miras a esa persona con cara de póker porque sabes que jamás se ha interesado por la moda… ¿cómo lo sabe?

Pues seguramente por la última fotografía de Instagram de Kendall Jenner, el Snapchat de su hermana Kylie o porqué alguna firma (muy lista) ha invitado a su desfile al chico guapo de turno que ha ganado unos cuantos miles de seguidores en los últimos meses.

Pues eso, la industria de la moda está cambiando. Los sitios más codiciados de las front rows ya no están ocupados por periodistas (por mucho que me pese como tal), sino que han sido substituidos por bloggers, instagramers y youtubers.

¿La razón? Muy fácil: difusión. Con las tecnologías 2.0, un diseñador sabe que si trabaja con las personas adecuadas a través de las redes sociales las imágenes de su desfile llegarán a la otra punta del mundo en una milésima de segundo.

Hace años pasó algo parecido con la generación de las tops de los 90: Cindy Crawford, Claudia Shiffer, Naomi Campbell… Y ahora ha vuelto a pasar lo mismo o sino recordemos la colaboración de este verano de Gigi Hadid con Tommy Hilfiger o en el mundo blogger, el shock que supuso que Marc Jacobs le pusiera el nombre de Bryan Boy a uno de sus bolsos. Fuerte, ¿no?

Y entonces llegó Dolce & Gabbana. Hace solo unos días, en la semana de la moda masculina de Milán, no desfilaron modelos (o solo unos pocos), sino que lo hicieron los Millennials: Cameron Dallas (viner y actor con 18 millones de seguidores y una serie propia en Netfilx), Presley Gerber (hijo de Cindy Crawford), Rafferty Law (hijo de Jude Law), Levi Dylan (nieto de Bob Dylan), las hijas de Stallone y los youtubers Marcus Butler, Juanpa Zurita y Jim Chapman y bloggers como el español Pelayo Díaz, entre muchos otros.

No es difícil encontrar detractores a este fenómeno: periodistas (sobretodo), modelos, diseñadores… Pero yo me pregunto ¿y qué? Seguramente muchos de ellos se han “currado” su trabajo igual que cualquier otro y tienen el mismo derecho a estar ahí. La moda pertenece a todos y la burbuja de cristal que es la industria debería abrirse más en todos los sentidos. Así que bravo, Stefano y Domenico. Lo habéis conseguido.

Entonces, ha quedado claro: ¿Who run the world? ¿Girls? Nope. Millennials.

Share on FacebookTweet about this on TwitterPin on PinterestEmail to someone